Páginas

domingo, 29 de mayo de 2011

De amores indirectos.

Hijo de una renombrada regalada: Me siento muy feliz de haberte conocido.


Hasta la tanga roja me coloqué
y acodada  a la barra del bar donde solías estar,
me decidí a esperar ver tus dos pies entrar
pero lo único que conseguí, fue no parar de pensar,
en los dos ojos que no me dejaban de mirar
y cual niña ingenua a su mirada me tuve que entregar.
Como me iba a imaginar 
que gracias a vos me fui a enamorar.

3 comentarios:

  1. Las mejores cosas siempre pasan por casualidad. O eso dicen.

    Besos rabiosos

    ResponderEliminar
  2. Lo mio es pura imaginación mezclada con realidad :D a veces reales mentiras escritas por la imaginación.
    Gracias Lunatico por siempre pasar x mi blog a leer!!! ya daré la vuelta
    taio: Gracias por el comentario me alegra que te haya gustado :)

    ResponderEliminar